Su nuevo single es uno de los más sentidos y profundos de su discografía
La dependencia emocional y la necesidad en una relación nunca fueron buenas compañeras. La argentina María Becerra lo sabe muy bien, por experiencia propia, a juzgar por el último single que ha lanzado, Mi debilidad. Un desamor que cuenta sobre una melodía urbana cuántas heridas se llevó el corazón.
Como ya es habitual entre los famosos, la artista preparó el estreno de su nueva canción dedicando su perfil de Instagram a anunciar y publicitar el tema. De hecho, Becerra describía esta composición de su puño y letra -producida por Big One- como un sentimiento tóxico de tocar fondo y estar vacío porque "nadie debería depender de otra persona para estar bien". También, ha expresado que se trata de la única canción con la que lloró porque habla de "la debilidad, la dependencia, que se puede llegar a sentir por alguien o por algo, y que este tenga el poder de modificar tu día, tu humor, tu esencia; y depende de cada uno tener la fortaleza para que esta situación no se convierta en tu mayor debilidad".
Mi debilidad cuenta con un mensaje desgarrador sobre una ruptura tras la que sigue echando de menos a la otra persona, lo complicado de la superación y el perdón y también pretende transmitir que no todo tiempo pasado fue mejor aunque cueste olvidar (o perdonar) ciertos momentos. Esta vez, además, la artista se "desnuda" en solitario, lejos de las últimas colaboraciones que había lanzado, auténticos hits como Miénteme junto a TINI. En la letra no faltan las combinaciones entre español e inglés, tampoco su sello como "la nena de la Argentina", un ritmo muy percutido y su propia segunda voz filtrada electrónicamente.
"Yo te pegué como un abrojo, justo al ladito de mis latido', y ahora ese maldito hilo rojo solamente conecta contigo"
El tema ha sido todo un éxito desde su estreno, especialmente el videoclip que lo acompaña: una producción de Asalto, dirigida por Julián Levy y rodado en el Centro Cultural Kirchner de Buenos Aires. Los millones de visualizaciones subieron inmediatamente como la espuma ya el mismo 29 de julio. El visual tiene a María como única protagonista, luciendo infinitos looks llenos de brillantes. También llama la atención la tela translúcida con la que cubre su rostro al principio del vídeo.
Con una impecable y emotiva interpretación representa esa contradictoria debilidad. A su vez, se mueve al compás de sensuales coreografías sobre el escenario o en el centro de cada sala. A base de diferentes planos alrededor de la cantante, observamos un suelo lleno de diamantes, los focos de colores y un juego óptico con los rayos solares y el reflejo de las joyas.
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