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La Asociación MIM celebra el I Congreso de Mujeres en la Industria de la Música

Bajo el nombre de "La Ola que no Cesa", diferentes artistas y profesionales se han reunido en mesas redondas, conferencias y entrevistas exclusivas para discutir la situación de la mujer en este sector


Cartel oficial del Congreso de MIM | Venus

Discriminación, techos de cristal, falta de mentoras, invisibilidad, sexualización... Estos son solo alguno de los conceptos con los que las mujeres, sobre todo las profesionales de la industria de la música, están tristemente acostumbradas a convivir. Para poder eliminar estos estereotipos e implementar nuevas tendencias feministas, la Asociación MIM ha organizado "La Ola Que No Cesa", el I Congreso de Mujeres de la Industria de la Música.


Durante dos jornadas, diferentes artistas y profesionales contaron sus inquietudes y pensamientos en conferencias y entrevistas de las que salieron nuevas propuestas e iniciativas que implementar. Uno de los momentos clave fue la mesa redonda de "Camino a la igualdad: vamos a ser prácticas". En ella participaron cinco mujeres con perfiles importantes en el sector que compartieron sus experiencias personales y dieron consejos a las asistentes. Ana Valdovinos, recientemente nombrada CEO de Ticketmaster, ha mostrado cómo las empresas de la industria de la música se están profesionalizando y feminizando en los últimos años ya que, según ha confesado, hasta el 2015 no tuvo en el comité de dirección a una mujer.


Es triste seguir viendo como, en igualdad de condiciones, en una reunión se toma más en cuenta las aportaciones de los hombres que de las mujeres. Esta falta de valoración se expresa en menos visibilidad y promoción profesional. Marisa Moya, Directora de Emerge Management y Comunicación, que declara que a veces no eres consciente de este machismo inherente: "Ves habitual que seas la única chica y que no te hablen directamente a ti. Siempre he estado a la sombra de un hombre en las empresas, hasta que monté la mía propia". Al igual que Blanca Salcedo, Directora de Revenue en Sony Music Entertainment, ella ha sufrido la condescendencia con la que se trata a las mujeres en los puestos de dirección.





Este tema también se traslada a la vida de las artistas. Anxela Baltar, componente de la banda Bala, no para de toparse con prejuicios a la hora de tocar en una sala de conciertos. Frases como "para ser chicas tocáis muy bien" o "como sois chicas pensaba que tocabais pop básico" son su día a día en este sector. Este sexismo protagoniza todos los medios de comunicación y los difernetes escenarios de promoción de las músicas. Según la cantante Christina Rosenvinge, siempre ha existido una dificultad extra para conseguir prestigio porque el canon es masculino. Los críticos se identifican con el discurso masculino y lo potencian aún sin darse cuenta.


Para conseguir poco a poco la feminización de la industria, alguna de las conclusiones y propuestas que se extrajeron de las jornadas fue apostar por la trasparencia de información y contactos para crear redes de networking con diferentes mujeres, la presencia de mentoras para que sirvan de ejemplo e inspiración para todas las que comienzan, el desarrollo del estatuto del artista con perspectiva de género o el correcto cumplimiento de la Ley de Igualdad de las instituciones públicas .


Estas son algunas de las razones de la creación de Venus de Vinilo y de la propia Asociación MIM. El primer estudio de género de la industria musical en España que elaboró esta misma asociación a principios de este año ha marcado un antes y un después por la lucha de la feminización del sector. En él se evidencia la gran precarización que sufre todo la industria musical en los últimos años, y que se ha acrecentado por el impacto del COVID-19, y por los persistentes techos de cristal. Algunos de los datos más destacados, y que cuadran perfectamente con lo que las profesionales comentaron durante estas jornadas, expresan que solamente en el 37% de las empresas de la música hay mujeres en los puestos directivos y apenas el 19% de los registros en la SGAE fueron por parte de compositoras. Estos datos remarcan aún más la importancia de estos congresos y de los futuros que seguro se celebrarán en el futuro próximo.



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