Se trata del primer adelanto de su próximo álbum de estudio, previsto para febrero
Dos años después de su último trabajo, 'Diario de una noche en Madrid', la cantautora cordobesa regresa con toda una declaración de intenciones y de coraje, Un golpe. Este nuevo tema es un homenaje a aquellos que ya no están y una llamada de atención a los que viven como si nada tuviese valor. Así, Vega da un paso el frente y se posiciona en primera línea de batalla por todas las injusticias y los sueños que quedan por luchar.
Se trata del primer single del que será su décimo álbum de estudio, que verá la luz en febrero de 2022, y en él ha trabajado junto a Kike Fuentes, productor único del tema. Más allá de una voz cargada de fuerza y determinación, esta canción pop-rock nace tras una profunda reflexión de la artista: "Necesité darme muchos golpes en el pecho para reanimarme, para rearmarme contra la pena, el dolor, la frustración, el miedo, la desidia. Comencé a darme un golpe en el pecho para dejar de llorar y sacar fuerzas casi como un rito tribal. Cada uno de ellos me hacía más fuerte y esta canción nació de golpe. Como un himno con el que despertarme cada mañana. Había una guerra que librar: sobrevivir. Aún pienso que ese golpe al final podría vencer cualquier guerra. El dolor de la pérdida de tantas personas que se marcharon para siempre no lo voy a olvidar, pero me daré un golpe en el pecho cada vez que sea preciso para recordar que somos muchos los que aún quedamos aquí y que merece la pena sacar coraje y pecho por todos nosotros".
Aunque está narrada desde una realidad oscura en la que muchos se ven sin futuro, Vega aprovecha el contexto mundial compartido por todos por lanzar Un golpe de causa-efecto. Su intención es que la gente se dé cuenta de cómo mirar atrás se ha vuelto una costumbre que nos hace olvidar que el presente sigue ahí y aconseja elegir el amor sobre el odio para aceptar el dolor sin rencores. Este mensaje concienciador pretende transformar los valores "malamente" adquiridos socialmente en empatía y buenas energías.
"¡Un golpe en el pecho para poder saltar al vacío! ¡Un golpe en el pecho para poder gritar por los míos!"
Para grabar el videoclip que acompaña a la canción, la cantautora se trasladó al desierto de Tabernas en Almería bajo la dirección de Ezequiel González. En el vídeo, silencia el ruido y vestida cual guerrera construye su trinchera -con papel higiénico- y sigue sus instintos más primarios. También, encontramos imágenes de la banda y una evolución narrativa: los poco "habitantes" de la zona pasan de no interactuar por estar atrapados en la tecnología a tener que colaborar y estar unidos para sobrevivir. Los tonos tierra y los efectos de luces complementan un visual que culmina en un mundo incompleto.
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